Expertos nacionales e internacionales de las tres entidades han hablado sobre cómo la data es capaz de analizar la situación que viven en Chile los más vulnerables, cuáles son los retos y las soluciones de cara a brindar oportunidades; herramientas como la digitalización, el diseño de estrategias para la igualdad entre hombres y mujeres y programas que mejoren la atención de estas instituciones en pos de un progreso más justo y sostenible.

Abrió el evento el Director Nacional de FOSIS, Nicolás Navarrete, quien señaló que “las microfinanzas nacieron porque hubo personas que se hicieron la pregunta: ¿cómo llegamos a donde nadie llega?” para luego plantear “¿A cuánta gente le estamos cambiando la vida? eso es lo que tenemos que medir.”

Luego siguieron las palabras de la Subsecretaria de Servicios Sociales del Ministerio de Desarrollo Social y Familia, Francisca Gallegos, quien abordó la sobrecarga de labores de cuidados sobre las mujeres y cómo desde el Ministerio están trabajando para propiciar la autonomía económica de las mujeres. Destacó también los valiosos datos que levantan Fondo Esperanza y FMBBVA para el diseño y profundización de las políticas públicas que inciden en las familias más vulnerables de nuestro país. “El esfuerzo que hace Fondo Esperanza y la FMBBVA a través de las microfinanzas es sustantivo.”

La FMBBVA es un referente en el ámbito de la medición de impacto, reconocida por los principales organismos internacionales. Su innovador modelo propio permite contar con información económica y social de las personas a las que atienden sus cinco entidades microfinancieras en América Latina, dentro de las cuales se encuentra Fondo Esperanza. La Fundación, ha sido la primera entidad privada en usar el Índice de Pobreza Multidimensional de Oxford que usan más de 100 países en el mundo para conocer la situación de las personas a las que atiende y de sus hogares.

Stephanie García Van Gool, directora de Medición de Impacto y Desarrollo Estratégico de la FMBBVA destacó el crecimiento sostenido tanto en las ventas como en los excedentes de los negocios de los emprendedores que reciben el servicio microfinanciero de Fondo Esperanza (41% en ventas y 46% en excedentes anual), que permite que más de la mitad de quienes se encontraban en situación de pobreza al inicio, hayan salido de ella. Éste es uno de los resultados del informe de desempeño social de la entidad

También, mostró con datos, la importancia del aumento del uso de canales digitales para la comercialización de los productos que venden los emprendedores, que gracias a la tecnología, consiguen introducirse en más mercados y aumentar las ventas y cómo éste es un indicador de la importancia que tiene disminuir las brechas digitales en los sectores más vulnerables para incrementar su desarrollo económico. 

Por otro lado, la experta indicó que “el ahorro de los hogares que apoya Fondo Esperanza disminuyó fuertemente tras la pandemia, quedando de manifiesto su fragilidad. El ahorro es fundamental si lo que queremos es lograr el desarrollo sostenible de los microemprendimientos que apoyamos”.

La FMBBVA ha sido reconocida como la primera fundación en contribución al desarrollo para la igualdad de género en el mundo, por eso la importancia de contar en este evento con Sofía Blamey, analista de políticas públicas y especialista en género de la división para América Latina y el Caribe del departamento de Relaciones Globales y Cooperación de la OCDE. Blamey presentó los datos actualizados del último estudio de Igualdad de Género de la OCDE para Chile, donde se propone una estrategia política global para abordar las desigualdades de género. En primer lugar, plantea que se establezcan políticas públicas sólidas con el objetivo de reducir las barreras que se interponen en el camino de una asignación más equitativa del tiempo y responsabilidades entre hombres y mujeres, desarrollando un sistema de cuidados efectivo por un lado y aumentando la flexibilidad laboral, por otro. Sostiene, también, que existe margen para incrementar la participación de la mujer en el mercado laboral en donde se garantice que el trabajo de las mujeres sea mejor remunerado, para lo cual es fundamental asegurar la educación de calidad para todos y promover carreras profesionales no tradicionalmente pensadas para ellas para que las mujeres adquieran aptitudes más competitivas.

Los indicadores del estudio de la OCDE son coincidentes con los que Fondo Esperanza levanta periódicamente de los más de 120.000 emprendimientos que apoya en todo Chile. De ellos, el 79% es liderado por mujeres y consistentemente ellas declaran dedicar una significativa mayor proporción de sus horas semanales a labores domésticas y de cuidado que los hombres. 

Si bien, para la mayoría de ellas el negocio es la principal fuente de ingresos de sus hogares, esta realidad es un impedimento para alcanzar su desarrollo y su sostenibilidad en el tiempo.

Fondo Esperanza presentó durante el evento su nuevo modelo de impacto con enfoque de género, el cual incluye la medición de nuevas vulnerabilidades, como la exclusión digital o la gestión del tiempo. Destaca por ser una herramienta longitudinal que permite comprender las variables que influyen en la salida de la pobreza, y con ello mejorar la oferta de valor de sus productos y servicios orientados a generar un impacto positivo.